Con el inicio de 2025, tanto empresas como autónomos en España deben afrontar nuevas normativas fiscales. Estas medidas están diseñadas para modernizar los procesos tributarios, fomentar la transparencia y combatir el fraude fiscal. A continuación, destacamos los cambios clave que marcarán el año:
1. Facturación electrónica obligatoria
La Ley Crea y Crece (Ley 18/2022) establece la obligatoriedad de la facturación electrónica para todas las empresas y autónomos. Aunque la entrada en vigor de la obligación estaba prevista para 2025, su aplicación queda pendiente a la aprobación del reglamento, pues será desde su aprobación cuando empiece a contar el plazo para implantar dicha obligación.
La facturación electrónica implica que las facturas deben cumplir con requisitos como:
- Uso de sistemas homologados por Hacienda, asegurando trazabilidad y autenticidad de los datos.
- Inclusión de códigos QR para verificación directa.
- Emisión en formatos estandarizados como XML o Facturae.
La facturación electrónica ofrece varios beneficios, como la reducción de errores manuales, menor impacto ambiental y mejoras en la eficiencia operativa. Además, facilita el control y la auditoría por parte de las autoridades fiscales, lo que reduce la posibilidad de fraude. Sin embargo, el incumplimiento puede acarrear sanciones graves, por lo que es esencial que las empresas y autónomos implementen sistemas adecuados a tiempo. Para facilitar esta transición, se recomienda que los contribuyentes inviertan en la formación de su personal y en la actualización de sus sistemas tecnológicos.
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2. Implementación de la Ley Antifraude
La Ley 11/2021 tiene como objetivo combatir el fraude fiscal a través de medidas como:
- Prohibición del uso de software que permita manipular registros contables.
- Introducción de la normativa Verifactu, que exige sistemas capaces de comunicar facturas electrónicamente a la Agencia Tributaria en tiempo real.
En principio la obligación de implantar estas medidas estaba prevista para julio de 2025, pero recientemente dicha obligación a quedado pospuesta hasta enero de 2026. A partir de su entrada en vigor, como decimos prevista para enero de 2026, todos los autónomos y empresas estarán obligados a utilizar un software certificado y adaptado a esta normativa en la generación de sus registros de facturación. Esta normativa afecta directamente a los desarrolladores de este tipo de software, quienes deben adaptar sus herramientas para cumplir con la nueva legislación. La medida no solo pretende reducir el fraude, sino también incrementar la eficiencia del sistema tributario al hacer que los procesos sean más transparentes y menos susceptibles a manipulaciones.
3. Enfoque en la digitalización
El plan europeo «VAT in the Digital Age» (ViDA) refuerza la apuesta por la transformación digital, con énfasis en:
- Automatización de procesos fiscales.
- Archivado digital obligatorio de facturas.
- Seguridad reforzada mediante encriptación y firmas electrónicas para proteger la información.
La digitalización de los procesos fiscales tiene como objetivo no solo cumplir con las normativas, sino también mejorar la competitividad empresarial mediante la optimización de procesos administrativos. Este proceso permitirá una gestión más eficiente de las obligaciones fiscales y contribuirá a reducir la carga burocrática, lo que a su vez favorecerá a las pequeñas y medianas empresas. Además, las empresas que adopten rápidamente estas tecnologías pueden ver una mejora significativa en su eficiencia operativa.
4.Cambios en la cotización de los autónomos para 2025
En 2025, se consolidarán nuevas variaciones en la cotización de los autónomos debido a la implementación progresiva del sistema basado en ingresos reales, iniciado en 2023. Este modelo busca alinear las contribuciones a la Seguridad Social con los rendimientos netos efectivos generados, promoviendo una mayor equidad en las cotizaciones.
Con este sistema, los autónomos deberán llevar un control detallado de sus ingresos para ajustar periódicamente sus bases de cotización. Entre las novedades más destacadas:
- Cuota mínima: Se establece en 200 euros al mes.
- Cuota máxima: Alcanzará los 590 euros mensuales.
- Cuota reducida para nuevos autónomos: Durante el primer año de actividad, los nuevos autónomos podrán beneficiarse de una tarifa plana de un poco más de 80 euros mensuales.
Este cambio subraya la importancia de planificar y gestionar de manera efectiva los rendimientos para garantizar el cumplimiento de las obligaciones con la Seguridad Social y optimizar los recursos disponibles. Además, este nuevo modelo busca fomentar la equidad entre los autónomos, ajustando sus aportes en cotizaciones a la realidad de sus rendimientos. Evitando así sobrecargar a los pequeños emprendedores con menores rendimientos.
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5. Nuevas ayudas para la digitalización
A El Gobierno extendió los plazos para solicitar el Kit Digital, y para las empresas del Segmento III ahora tienen tiempo hasta el 31 de octubre de 2025 para acceder a estas ayudas, las cuales facilitan la implementación de tecnologías digitales como la facturación electrónica homologada, crucial para cumplir con las nuevas normativas fiscales.
Sin embargo, las solicitudes para los Segmentos I y II finalizaron el 31 de diciembre de 2024, por lo que aquellas empresas y autónomos que no presentaron su solicitud antes de esa fecha ya no podrán beneficiarse de estas ayudas.
En cuanto a los Segmentos IV y V, todavía no se han publicado fechas oficiales para su apertura, pero se espera que las convocatorias comiencen a principios de 2025. Las ayudas del Kit Digital son una excelente oportunidad para las empresas que necesitan invertir en nuevas tecnologías sin tener que asumir grandes costes, por lo que es fundamental estar atentos a las convocatorias y aprovechar estos fondos.
6. Revisión de la edad de jubilación
En 2025 se prevé un cambio significativo en la normativa relacionada con la jubilación de los autónomos. Según los nuevos ajustes establecidos por la reforma de pensiones, se requerirán al menos 38 años y 3 meses de cotización para que los autónomos puedan acceder al 100% de la base reguladora a los 65 años (66 años y 9 meses si no se alcanza el requisito de cotizar durante los 38 años y 3 meses). Este cambio tiene como objetivo mejorar la sostenibilidad del sistema de pensiones y garantizar que quienes se jubilen a la edad estándar hayan realizado suficientes aportaciones a lo largo de su carrera laboral.
El aumento progresivo de la edad de jubilación es parte de una serie de medidas introducidas por la Ley 21/2021, que establece ajustes en el sistema de pensiones y los requisitos de cotización. Esta ley establece, además, que aquellos que no alcancen el mínimo de cotizaciones necesarias para recibir el 100% de la pensión deberán seguir trabajando más allá de los 65 años o recibir una pensión reducida en función de sus aportaciones. Es fundamental que los autónomos se informen y planifiquen su jubilación con antelación para cumplir con estos nuevos requisitos.
El ajuste tiene como finalidad asegurar una mayor equidad en el sistema de pensiones, obligando a quienes han cotizado durante menos tiempo a trabajar más años para poder acceder a una pensión completa. Además, este cambio también puede tener implicaciones para los autónomos en términos de planificación financiera a largo plazo.
7. Revisión y simplificación de impuestos
El nuevo régimen de IVA franquiciado ofrece una oportunidad para que empresas y autónomos que cumplan determinados requisitos puedan quedar exentos de presentar las declaraciones trimestrales de IVA. En algunos casos, también podrían estar dispensados de emitir facturas que incluyan este impuesto.
Este modelo, establecido por la Directiva (UE) 2020/285 del Consejo Europeo el 18 de febrero de 2020, ya está en funcionamiento en varios países de la Unión Europea, proporcionando un marco regulador más ágil y sencillo.
La medida supone un beneficio importante para determinados autónomos y negocios, al reducir la carga administrativa asociada al IVA, como la presentación del modelo 303.
Sin embargo, en España aún no se ha implementado esta reforma, por lo que su aplicación no es vigente actualmente.
Este año traerá desafíos y oportunidades significativas para las empresas en España, especialmente en el ámbito de las normativas fiscales. Adaptarse a estas novedades fiscales no solo garantizará el cumplimiento legal, sino que también permitirá optimizar la gestión empresarial y fortalecer las relaciones con clientes y autoridades tributarias.
Contar con una asesoría fiscal especializada es clave para mantenerse actualizado sobre los cambios regulatorios, como la facturación electrónica obligatoria o la Ley Antifraude, y garantizar una transición exitosa. Además, aprovechar recursos como subvenciones del Kit Digital puede reducir los costes asociados a la implementación de estos nuevos sistemas.
Por eso, en Afilco Asesores, como tus auditores en Valencia, te aseguramos que tu empresa no solo cumpla con las normativas, sino también mejora su planificación financiera y evitar posibles sanciones. Prepárate para 2025 y asegura un futuro competitivo para tu negocio.
